domingo

Lima

(…) la angustia de la ciudad
es una emboscada del reloj.
Lógica del marcapaso que se deshilacha en el brasero de la toma,
en el mameluco sin trabajo, en el guiso del deber.
La angustia tiene un legado de reptil en el idioma
y un cross de derrota por goteo.
Su navaja esquía entre mis dientes,
lima la ternura (…)

.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Nunca te ví callar ante la injusticia y la desigualdad. Pero de ahí a que eso te lime la ternura! Gracias Poeta por el compromiso! Te dejo un beso y me voy al trabajo.
Zoe

Sylvia dijo...

Sergio, tus primeros versos me atraparon: '....es una emboscada del reloj.' ¡Qué bien lo has expresado! Soy patagónica, pero vivo en la gran manzana de Baires...¡quiero volver a mis manzanitas en el Valle de Río Negro! 'Su navaja esquía entre mis dientes, lima la ternura...' Ay, tal cual, duelen tus versos y duele la ciudad.

Sergio Sarachu dijo...

Zoe: gracias por tus palabras y gracias por dejarme un beso muuuuuyyyy tempranero, que me acompañó todo el día!!
Siempre es un placer que andás por acá...

Sylvia: yo también viví muchos años en otras ciudades, entre ellas Bs. As., lejos de la Patagonia. Volví hace casi 6 años y también volvió la poesía...
acá también duelen las ciudades, pero quizá por los afectos o porque las sentimos más "nuestras", no duelen tanto.
Es un enorme placer que ya tengas las "ganas" de volver, a partir de ahora es sólo encontrar la forma, el momento, los cómo, en fin, las paradas intermedias para llegar a destino.
Un abrazo

Nan dijo...

la angustia tiene un legado... ojalá lo olvide entre tanta cosa

Sergio Sarachu dijo...

ojalá lo olvides, Nan, ojalá...